lunes, 24 de septiembre de 2012

Sermón: Una Piedra en el Zapato.


Texto Bíblico: 1 Samuel 1:1-28. 

Introducción: Ana no había podido concebir hijos, y en los tiempos del Antiguo Testamento, una mujer estéril era considerada una fracasada. Su esterilidad era una vergüenza social para su esposo, era evidencia de una terrible maldición. Los hijos eran una parte muy importante de la estructura económica de la sociedad. Eran una fuente de trabajo para la familia y su deber era cuidar a sus padres en su vejez. Si una esposa no podía tener hijos a menudo era obligada, por las costumbres del antiguo Medio Oriente, a entregar a una de sus siervas a su esposo para tener hijos por ella. Aun cuando Elcana pudo haber dejado a Ana, permaneció dedicado a ella amorosamente a pesar de la crítica social y de sus derechos bajo la ley civil. En la vida vivimos con circunstancias que nos impiden tener paz, y quietud. Ana había experimentado esto en carne propia y era como:

Tema: Una Piedra en el zapato.

De Ana aprendemos lo siguiente:
I. Acepto y confronto su Realidad.
   
1 Samuel 1:1-8
v Su realidad era: No podía concebir hijos. Además tenía que soportar la burla de su rival. 1:6.
v Su realidad era: Tratar de manejar la situación, todos los días. Aunque en secreto tenía que llorar y lamentar su situación. 1:6.
v Su realidad era: No recibir el apoyo emocional que necesitaba. Necesitaba un abrazo.
a)   Es fácil pensar que los héroes de la Biblia son diferentes a nosotros. Se nos hace difícil identificarnos con ellos por cuanto pensamos que son perfectos y su cultura es diferente a la nuestra.
b)   Ana no tenía hijos, su nombre se añadía a la lista de mujeres estériles de la Biblia. Tales como Sara (esposa de Abraham), Rebeca (esposa de Isaac), Raquel (esposa de Jacob), Ruth (esposa de Boaz), Elizabeth (la madre de Juan el bautista).
c)   Su problema no era natural, sino provocado por Dios. 1 Samuel 1:5,6
d)   Sin embargo su fe la llevo a clamar en perseverancia a Dios.

II. manifiesta oraciones fervorosas. 1 Samuel 1:9-18
a)   Las circunstancias no detuvieron a esta mujer. Su oración es una clara expresión de su fe en Dios.
b)   Su llanto se torno en oración fervorosa, sus lágrimas en adoración a Dios. Su oración se torno en una promesa a Dios, si respondía a su clamor.
c)   Esa piedra en el zapato, nos lleva a buscar a Dios.
d)   Solo Dios puede quitar esa piedra y darte la paz y quietud que tanto nececitas.

III. Esa  fe lo llevo a  experimenta la provisión de Dios:
      1 Samuel 1:19-20
a)   Su perseverancia fue escuchada por Dios.
b)   Ana concibió y dio a luz un hijo el cual llamó Samuel que significa “por cuanto lo pedí a Jehová”
c)   Dios le concedió la petición a Ana por cuanto necesitaba Dios un profeta para su pueblo.
d)   Mientras tengas esa piedra en el zapata, difícilmente podrás escuchar la voz de Dios.

IV. Su fe en Dios lo llevo a  cumplir su promesa:
         1 Samuel 1:21-28
a)   Analiza cuantas ocasiones has hecho una promesa a Dios, si te responde tu petición. ¿Has cumplido lo prometido?
b)   Dios es galardonador de los que le buscan y cumple su promesa.
1 Samuel 2:19-21

V.- Toda mujer de fe, no cesa de adorar a Dios:
1 Samuel 2:1-11
a)   Aquella mujer que un momento de su vida manifestaba aflicción. Ahora elevaba cánticos de alabanza a Dios por sus maravillas.
b)   La piedra en el zapato, le impedía adorar a Dios, porque su centro de atención estaba en la situación en la que vivía.
v 1 Samuel 2:1-2, su atención no está en la bendición sino en el quien la bendijo.
v 1 Samuel 2:3, su centro de admiración es la sabiduría y el conocimiento de Dios.
v 1 Samuel 2:6, reconoce el poder de Dios de dar y quitar la vida.
v 1 Samuel 2:7, reconoce que es Dios quien humilla y exalta.

Conclusión: Ana tuvo que aceptar y confrontar su realidad, orar con fervor, esa fe que tuvo en Dios, lo llevo a ver las maravillas de Dios, y como resultado ella hizo votos a Dios, y así toda su vida se convirtió en adoración.  Alza tu rostro y reconoce cuán grande es el amor de Dios hacia tu vida, no por lo que hagas sino por lo que eres. Él conoce tus aflicciones, tus conflictos, tus dolores, él está presto a manifestarse en tu vida.
No te concentres en tus problemas, en tus aflicciones, enfócate en adorar a Dios, que está por encima de todo lo que puede afligirte. Que esa piedra en el zapato, no desvíe tu mirada de Dios. 

jueves, 20 de septiembre de 2012

Radio Cristiana En Vivo (Eben-ezer) Musica, predicaciones


 Somos una iglesia con compromiso y unidad. Nuestro Texto lema es Hechos 2:44,47. Todos los que habían creído estaban juntos y tenían todas las cosas en común;alabando a Dios y hallando favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día al número de ellos los que iban siendo salvos.

Para escuchar nuestra radio solo tienes que ir al siguiente link: http://milos7.caster.fm/

Nuestr sitio  web: http://www.eben-ezer.com.mx/?logout=1

martes, 18 de septiembre de 2012

Sermón: Dios no llama a personas especiales.


Texto: Génesis 12:10-20.
Tema: Dios no llama a personas especiales
Introducción:
Conozcamos a Abram: El nombre significa “El padre es exaltado” Después del pacto en Gn. 17.5 su nombre se convierte en Abraham  significa Padre de multitudes. 
v  Fue llamado amigo de Dios. 2 Crónicas 20:7. 
v  Santiago confirma esto en el NT. Santiago 2:23.
v  Jehová se revela a Moisés como el Dios de Abraham. Éxodo 3:6.
v   El Padre de la fe. Hebreos 11:8.
Es interesante estudiar la Escritura y descubrir que Abram a pesar de su relación con Dios no era un hombre perfecto e inmaculado y mucho más en sus inicios, tenemos ante nosotros un hombre con pecados como cualquiera de nosotros y el texto que hoy vamos a analizar, nos revela que Dios no llama a personas especiales, con virtudes, posesiones, guapos. Él llama a personas para hacerlas especiales. Ahora bien esto no es un pretexto, para cometer pecado.

A.  En el texto encontramos varias cosas que Abram tiene.
1. Falta de fe: ¿Sabían que la falta de fe es pecado? Romanos 14:23 (Ver 10) en lugar, de quedarse en Canaán y creer que en medio de la hambruna Dios le iba a sustentar lo cual hubiera sido toda una escuela de Fe sin embargo el decidió abandonar la tierra prometida, descender a Egipto y confiar más en su propia habilidad. Depositar nuestra confianza en los hombres, en nuestras propias ideas pecaminosas etc es un pecado.  El profeta Jeremías dice en el capitulo 17:5. Maldito el hombre que confía en el hombre.

2. Engendro pensamientos pecaminosos (Ver 11 – 13): Cuando pensamientos de maldad vienen a nuestra vida y los consentimos esto es pecado. El profete miqueas nos dice en el capitulo 2:1. Hay de los que en sus camas piensan iniquidad… Abram no confió en la protección de Dios.

3. Fue egoísta: Para salvarse el pensó en su bienestar y no le importo si su esposa adulteraba, era violada, deshonrada. Pensar solo en mi y lo que a mí me interesa sin importar los demás es pecado. 1 Juan nos revela las características del egoísmo: 1 Juan 3:17.

4. Fue piedra de tropiezo: es decir, incito a su esposa haciéndola pecar, su esposa tenía que decir que solamente era su hermano: (Ver 14 - 15) No solo motivar sino también ayudar a otros a pecar es pecado

6.  Engaño, mintió y robo al faraón: (Ver 16) a través de engañar a todos diciendo una media verdad el fue remunerado adecuadamente por el faraón y el hecho de que esta remuneración sea dada por medio del engaño la convierte en robo. Engañara y robar es pecado

Cuanto pecado hubo en Abraham y al confróntanos nos damos cuenta que su historia no es muy distinta a la nuestra, a un así: somos llamados santos, hemos sido justificados, sin embargo hay una realidad en nosotros con la cual tenemos que luchar a Diario y muchas veces en nuestra vida nos cruzamos la raya, nos desviamos, no tenemos mucha fe,  engendramos pensamientos malos, somos egoístas, tal vez hacemos caer a alguien, engañamos, mentimos, aun así Dios sigue fiel. Estos y muchos defectos tenia Abraham, sin embargo, fue llamado por Dios, fue llamado amigo de Dios, y el padre de la fe. Es en esto donde la gracia de Dios se manifiesta, y nos inspira a llegar a ser, como estos grandes hombres fuero. No éramos especiales, el nos hizo especiales. Solo por su gracia.  Busquemos entonces ser amigos de Dios, y hombres de mucha fe. 

lunes, 17 de septiembre de 2012

Exégesis de 2 Pedro 1:16-21


Trabajo Exegético. 
Por Amílcar López López.
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2  de Pedro 1:16-21.

I.- Lectura del Contexto.

1.- Autor.

a) Evidencia externa: Algunos han comentado que la autenticidad de la segunda carta del Apóstol Pedro carece de evidencia externa, como cualquier otra carta del Nuevo Testamento.

“La Versión Siríaca Antigua (la PeschitoJ no la incluyó (pero sí aparece en la Versión Siríaca Posterior). 2 PEDRO era parte de la colección de libros llamada la Antilegomena palabra griega compuesta de "contra" y "decir"; o sea libros "disputados"[1] sin embargo esto no puede tener mucho peso, ya que se necesita tener más escritos antiguos que digan lo mismo. En este caso, tenemos el testimonio de manuscritos más antiguos que la versión Siriaca. Entre ellos están los siguientes manuscritos: “el Sinaítico (año 350), el Vaticano (325-350) y el Alejandrino (450). El concilio de Laodicea (año 366), el de Hipona (393) y el de Cartago (397)”[2] Estos incluyen la segunda carta del apóstol Pedro, en el canon.

Ahora bien, en cuanto a  las pruebas externas de la autenticidad son irrefutables. Autores tan diversos como Clemente de Alejandría, Ireneo de Lyon, Tertuliano de Cartago, afirman que es de Pedro. Eusebio afirma que Papías y Policarpo la conocían y la citaban. Así, desde el principio, esta epístola ha sido confirmada por  evidencias indiscutidas.

b) Evidencia interna.
La evidencia interna de su autenticidad es de peso. Pedro reclama ser el autor, y se expresa en el versículo uno de  una manera  que ningún autor falso lo haría. En el capitulo 3:1nos dice que ya había escrito a los mismos lectores a quienes se dirigió  en 1 Pedro.  Se nombra a si mismo "Simón Pedro..."(1:1), afirma haber sido testigo de la Transfiguración (1:16) y haber recibido de Cristo la predicción de su martirio (1:14 Jn 21:19) Se pone en un plano de igualdad con Pablo (3:15). No hay duda alguna que el apóstol Pedro haya escrito esta carta.
Heverett Harrison, nos dice: Un punto de partida conveniente es Orígenes (cerca del año 240), ya que él es el primero, según las fuentes conocidas, en atribuir la obra a Pedro. Su testimonio es el siguiente: "Pedro ha dejado una epístola reco-nocida, y quizás una segunda; ya que esto es disputado".[3]
Estando convencidos de la autenticidad de esta carta, veamos entonces la fecha de este escrito.


2.- Fecha.

Algunas posibles conclusiones de que esta carta fue escrita  en el  66 o 67 D.C. son estas:
v  Pedro ya era de grande edad cuando la escribió (1:14; Jn. 21:18,19).
v  Se cree que Pedro fue muerto al fin del año 67, o a principios del 68, en el año decimo­ tercero de Nerón.
v  Si no todas; la mayor parte de las cartas de Pablo ya habían sido escritas (3:15-16).  Estas cartas fueron escritas entre el año 62 (1 Tes.) y el 66 (2 Tim.). Había pasado suficiente tiempo para que fuera pervertida por algunos,  la enseñanza de algunas cartas, como lo dice Pedro en el capitulo 3:16.
Desde luego es imposible fijar una fecha exacta. Everett Harrison dice: “Si se acepta que 2 Pedro es obra del apóstol, entonces una fecha cercana el año 64 es la más probable, poco antes de su martirio”[4]

3.- Los destinatarios.

El escritor del libro de Piedra en Piedra comentando al respecto dice: “Probablemente fue dirigida a los mismos cristianos de la primera carta. ‘Es una carta escrita a personas que se estaban enfrentando a dificultades y problemas”[5] esto es probable, ya que en el capitulo tres nos dice algo de esto.
Simón kistemaker dice: “La segunda epístola de Pedro parece ser una epístola general no dirigida a ningún grupo en particular”[6] En 2 Pedro, sin embargo, el escritor se dirige a los lectores personalmente. Declara que “ésta es ya la segunda carta que les escribo” (3:1). Si interpretamos estas palabras como una referencia a 1 Pedro, podemos llegar a la conclusión de que los lectores residen en el Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia.
Además, los lectores conocen las epístolas de Pablo (3:15–16), porque algunas de las cartas de Pablo fueron escritas a los cristianos que vivían en el Asia Menor.
Ahora bien, suponemos tal como lo dice kistemaker: “Como en 1 Pedro, suponemos que los destinatarios de 2 Pedro eran tanto cristianos judíos como cristianos gentiles. Basados en el contenido de 2 Pedro no podemos establecer distinción alguna entre cristianos de origen judío o de origen gentil. Por ejemplo, en 2 Pedro detectamos el uso y fundamentación en el Antiguo Testamento que también es evidente en 1 Pedro. En ambas epístolas el escritor cita el Antiguo Testamento y hace alusiones al mismo; en ambas cartas menciona el diluvio del cual Noé y su familia fueron protegidos; y en ambos documentos enseña la doctrina de la inspiración divina.”[7] Podemos concluir entonces, que los destinatarios de la segunda carta, son los mismos a los que se dirigió Pedro en su primera carta.

4.- Lugar de escritura.

Ray C. Stedman, comentando al respecto nos dice: “Es muy factible que esta epístola fuese escrita en el mismo lugar que la primera, cuando Pedro se hallaba prisionero en Roma, posiblemente por orden de Nerón”[8] es posible afirmar que esta carta fue escrita desde Roma, ya que Pedro dentro de su carta anuncia su muerte, tal vez porque su vida se hallaba  en peligro.
La opinión de algunos eruditos respecto al lugar de donde se escribe la carta, es  Roma. Everret Harrison nos dice: “Si se acepta la genuinidad de la obra, Roma es el lugar de origen más probable.”[9] Realmente no podemos afirmar el lugar de donde se escribe la carta, solo suponemos que fue desde Roma.

5.- Propósito.

Peter comenta lo siguiente: “La primera carta presenta claramente, al igual que la segunda, que el propósito del Apóstol al escribir ambas cartas era consolar, alentar y fortalecer a estas personas. Se enfrentaban a dificultades, tanto externas como internas, porque su mundo, como uno nunca se cansa de señalar, era un mundo muy parecido al nuestro” [10]esto es inobjetable, ya que las circunstancias que rodean todas las cartas, tenían y tienen como propósito fortalecer la vida de los cristianos que de una u otra manera son perseguidos. Sobre todo en el siglo primero, el declararse un seguidor de Jesucristo, era como condenarse a la muerte.
Sin embargo el propósito de la carta no se limita solamente a eso, ya  que las iglesias se enfrentaban a problemas aun más serios; y esto tenía que ver con  la falsa doctrina que estaba amenazando la fe de los cristianos. 
Pedro trata de esto en el capítulo 1, incitando a sus lectores a entender adecuadamente la preciosidad de la fe, la cual debería producir en ellos una vida moral completamente cristiana (1:3-11). Luego les recuerda la autoridad de la Escritura (1:12-21) sobre la cual descansa esta fe cristiana. ‘El motivo especial de este fuerte énfasis en una vida moral sana, y en la autoridad que la sostiene, se hace evidente en los últimos dos capítulos de la carta. Habían descuidado la santa manera de vivir, y ciertos falsos maestros menospreciaban  la autoridad apostólica y escritural. La actividad de estos maestros se describe, en parte, como en el futuro y, en parte, como en el presente. Su venida se predice a veces como algo de lo cual hay que advertir a los lectores, y a veces como si ya estuviera en el pasado. Quizás la explicación sea que los falsos maestros ya habían estado actuando en las iglesias desde las cuales Pedro estaba escribiendo o en otras que él conocía, pero que todavía no habían llegado a los lectores de esta carta (J.
Gresham Machen)

6.- Situación Política y Religiosa.

La persecución, muy tratada en la 1ª epístola, va a más. No  obstante, no se menciona aquí pues hay un nuevo peligro, aún mayor,  que preocupa a Pedro: la amenaza de los falsos maestros y su doctrina. Salir al paso  de la doctrina de los Gnósticos. Enseñaban que  bastaba con la inteligencia para conocer la salvación en Jesucristo  (“gnosis” es “conocimiento” en griego). Era posible aprender una  sabiduría superior por medio de una serie de iniciaciones sucesivas  hasta alcanzar la perfección.
F.F. Bruce en su libro, la defensa apostólica del evangelio escribe: “Si la proclamación de Cristo crucificado fue un escándalo para los judíos piadosos, fue una insensatez para los gentiles sensatos, especialmente para aquellos que conscientemente se sentían herederos de la cultura griega. Para ellos la cruz no constituyó un problema teológico sino un obstáculo de orden práctico que les impedía pensar seriamente en el evangelio. ¿Cómo podía esperarse que aceptaran a un Libertador, a un Guía y a un Señor que no tenía ni los conocimientos ni el poder necesarios para salvarse a sí mismo de semejante muerte ignominiosa?”[11] Y con semejante defensa, el evangelio presentó un desafío directo a la filosofía pagana, del mismo modo que lo hizo a la ley del judaísmo, obviamente esto constituyo una amenaza a la política de ese momento.
Si el evangelio desafió hasta las manifestaciones más elevadas de la cultura pagana, mucho más desafió a aquellas manifestaciones que eran ofensivas especialmente a los ojos de los judíos y cristianos monoteístas, es decir, las varias formas de la idolatría pagana. Aquí vemos, como en ninguna otra parte, cómo la defensa de la verdad implica la refutación del error.


7.- Bosquejo de la carta del Apóstol Pedro.
I. Saludos e introducción, 1: 1-11.
A. Saludos, 1: 1-2.
B. Exhortación, 1: 3-11.
II. Propósito de la epístola, 1: 12-21.
A. Fortalecimiento de los creyentes en la verdad presente, 1: 12-15.
B. Confirmación del Evangelio mediante un testimonio personal, 1: 16-18.
C. Confirmación del Evangelio por la profecía, 1: 19-21.
III. Advertencias contra falsos maestros, 2: 1-22.
A. Falsos maestros y sus herejías engañosas, 2:1-3.
B. Castigo de los impíos; liberación de los justos, 2:4-10 p.p.
C. Verdadera naturaleza de los falsos maestros, 2: 10 ú.p.-22.
IV. Segunda venida de Cristo y preparación para recibirlo, 3: 1-18.
A. Referencia al testimonio de los profetas y los apóstoles, 3: 1-2.
B. Los burladores refutados por los hechos del diluvio, 3: 3-7.
C. Certeza del regreso de Cristo, 3: 8-10.
D. Exhortación a vivir santamente en anticipación del advenimiento, 3: 11-18.


9.- Lectura semántica.

v  Poder: fuerza, capacidad, poder, capacidad de llevar cualquier cosa a cabo. Utilizado en sentido absoluto, denota. Poder para obrar, para llevar algo acabo. Poder en acción.
v   (μυ̂θος, fabulas), significa primeramente habla, conversación. La primera sílaba procede de una raíz mu –, que significa cerrar, mantener secreto, estar callado; de ahí derivan muo, cerrar (ojos, boca) y musterion, secreto, misterio; de ahí, historia, narración, fábula, ficción (castellano, mito). Se usa este término de los errores gnosticos y de las fábulas judaicas y profanas y de las genealogías (1Ti_1:4; 1Ti_4:7; 2Ti_4:4; Tit_1:14); de historias ficticias (2Pe_1:16) Se entiende por fábula la narración de pura ficción alegórica, en que, por medio de la personificación de los seres irracionales, inanimados o abstractos, se da una enseñanza útil y moral. En el Nuevo Testamento se usa la palabra «fábula» para referirse a las religiones paganas y a las erróneas enseñanzas que falsos maestros pretenden introducir en las comunidades cristianas.
v  sofizo (σοφίζω, Artificioso), de sofos, sabio (relacionado etimológicamente con sofes, sabroso). Significa en la voz activa hacer sabio (2Ti_3:15; igual que en la lxx en Sal_19:7, p.ej., «haciendo sabios a los pequeños»; en 119:98: «Tú me has hecho más sabio que mis enemigos»). En la voz media significa: (a) venir a ser sabio; no se usa así en el NT, pero se halla en la lxx (p.ej., en Ecl_2:15, Ecl_2:19; Ecl_7:17); (b) hacer el sofista, actuar artificiosamente; se usa con este significado en la voz pasiva en 2Pe_1:16 : «fábulas artificiosas». La rvr77 lo vierte siguiendo el original más de cerca, «ingeniosamente inventadas».
v  Majestad (de megas, grande), denota grandeza, majestad. Se usa de Dios el Padre, significándose su grandeza y dignidad, en Heb_1:3 : «la Majestad en las alturas», y 8:1: «la Majestad en los cielos»; en Jud_1:25  se usa en una adscripción de alabanza reconociendo los atributos de Dios: «majestad» significan "eminencia", "gloria",* "dignidad", "esplendor", "grandeza", "sublimidad", "grandiosidad", "glorioso", "majestad").  El término "majestad" aparece con mayor frecuencia en relación con Dios y su obra.
v   parousia (παρουσία,), lit: presencia (para, con, y ousia, un ser; de eimi, ser). Denota tanto una llegada como una consiguiente presencia con. Otras palabras denotan la llegada. Parousia se usa para describir la presencia de Cristo con sus discípulos en el monte de la transfiguración (2Pe1:16). Cuando se usa del retorno de Cristo, en el arrebatamiento de la Iglesia, significa no meramente su llegada momentánea por sus santos, sino su presencia con ellos desde aquel momento hasta su revelación y manifestación al mundo.
v  Monte: En la Biblia significan, a veces, lugares sagrados, y simbolizan la eternidad, fuerza, estabilidad, y reino mesiánico. El término monte, es empleado  en las Escrituras de manera figurada. Las montañas son símbolo de firmeza  de estabilidad, de solidez,  Sal 30 (29), 7-8; 65 (64), 7. Los montes son testigos de las obras de Dios,  Sal 114 (113), 4; de su juicio, Sal 98 (97), 8. La justicia de Dios es como   las altas montañas, Sal 36 (35), 6;
v  Antorcha: hacha o tea que sirve para dar luz. Se usaban en la Antigüedad en todos los pueblos como instrumentos de iluminación, y también los hebreos (Gn. 15:17; Jn. 18:3). A veces las empleaban en las batallas y en los sitios de las ciudades (Zac. 12:6). Estaban hechas de materias resinosas, generalmente plantas o derivados del betún. Las llamadas teas eran especialmente las usadas con fines guerreros (Jue. 6:16, 20; 15:4); se usa también en sentido simbólico para indicar iluminación espiritual (Jn. 5:35; 2 P. 1:19; Is. 62:21).
v  profetikos (προφητικός,), de la profecía, o relacionado con ella, o procediendo de un profeta. Con el cierre del canon de las Escrituras es evidente que la profecía se ha acabado, en el sentido de predecir el futuro. (1Co_13:8-9). El maestro ha tomado, en su medida, el lugar del profeta, cf. el significativo cambio en 2Pe 2:1. La diferencia es que en tanto que el mensaje del profeta era una revelación directa de la mente de Dios para la ocasión, el mensaje del maestro es tomado de la revelación finalizada, de las Escrituras»
v  epilusis (ἐπίλυσις), de epiluo (epi, arriba; luo, soltar) soltar, liberar, resolver, explicar. Denota una solución, explicación, lit: una liberación (2Pe 1:20 : «de interpretación privada»); esto es, los escritores de las Escrituras no impusieron su propia construcción sobre las palabras «divinamente inspiradas» que registraron.
v  fero (φέρω), llevar, traer. Se traduce «siendo inspirados» en 2Pe 1:21. En el uso de este verbo, significa que fueron «llevados», o «impulsados», por el poder del Espíritu Santo, no actuando en conformidad con sus propias voluntades, ni expresando sus propios pensamientos, sino siguiendo la mente de Dios en palabras dadas y ministradas por él.

II.- Lectura bíblica-teológica.

Versículo 16. Después de un paseo general sobre el contexto, de la carta del apóstol Pablo, en este momento nos asentaremos enfáticamente en el texto. El apóstol continúa en el versículo 16 diciendo:

 “Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fábulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad”

Ahora bien,  Pedro llega al mensaje que había sido su principal propósito traerle a su pueblo, relativo al " poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo.» Como veremos con toda claridad en lo sucesivo, el gran propósito de esta carta era recordarles a los creyentes la seguridad de la Segunda Venida de Jesucristo. Los herejes a los que  Pedro ataca ya no creían en ella; se había retrasado tanto que la gente había empezado a creer que no sucedería nunca.
El objeto de la predicación de Pedro, lo mismo que la de los otros apóstoles, versaba principalmente sobre el poder divino y la venida o parusía de nuestro Señor Jesucristo (v.16). San Pedro en su predicación, que nos ha sido conservada en el evangelio de Marcos 9:2-13.  Acentúa la venida del Hijo del hombre en el esplendor de su poder. La enseñanza cristiana acerca de la parusía no está entretejida con fábulas hábilmente inventadas, como pensaban y enseñaban los falsos doctores.
Pedro le dice a sus lectores, que el evangelio de Jesucristo, que ellos predican, no es un cuento, no es fabula; sino que es un testimonio verdadero.
Por si queda alguna duda, Pedro continua: “no me lo contaron, no es una fabula. Sino que vimos con nuestros propios ojos, la presencia de Dios”

Versículo 17,18.  Pedro nos traslada Marcos 9:2-13, al monte de la transfiguración. Pedro lo llama al monte Santo. 
Para comprender un poco más sobre esto, es necesario saber que paso en el monte, tal como lo dice mateo, en el monte alto. La palabra griega para “transfigurado” es metemorphothe, de la cual sacamos la palabra metamorfosis.  Usamos esta palabra para describir el cambio que ocurre cuando una oruga se convierte en mariposa.  El rostro de Jesús ‘resplandeció como el sol, y sus vestidos fueron blancos como la luz.’  Esto nos recuerda a Moisés en Sinaí.  Después de su encuentro con Dios, la cara de Moisés brillaba tanto que la gente tenía miedo.  Entonces, Moisés tuvo que usar un velo sobre su cara (Éxodo. 34:29-35).  Los discípulos conocen esta historia de Moisés y pueden ver la conexión. Es posible que Pedro se refiera a esto, cuando usa la palabra majestad, en el versículo 17. Confirmando así que Jesús, es el enviado o el Mesías.

Ahora nos preguntamos ¿Por qué Moisés y Elías?
- Representan la ley (Moisés) y los profetas (Elías), las figuras más importantes del Antiguo Testamento y las secciones más autoritarias de las Escrituras Hebreas.

Versículo 19. El versículo comienza: “Tenemos también” con esto Pedro les dice a sus lectores, que  no solamente un argumento tiene para desacreditar a los falsos maestros, sino que está también la palabra profética.
Algo más seguro y fidedigno que el ser testigo de la Transfiguración es “la palabra profética más segura.” La Escritura es una luz enfocada sobre la venida del “lucero de la mañana.” Lo cual muchos falsos profetas como lo dice Pedro en el capítulo 2:1. Niegan, y hasta se burlan de esto que los apóstoles predican, así nos declara Pedro en el capitulo 3:4. Diciéndonos:  “¿Qué hubo de esa promesa de su venida? Nuestros padres murieron, y nada ha cambiado desde el principio de la creación."

Versículo 20,21.

"Los santos varones de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo" significa que las Escrituras no vinieron como consecuencia del trabajo creativo de la propia invención o interpretación de los profetas. Dios inspiró a los que escribieron, así que su mensaje es auténtico y confiable.
Algunos eruditos interpretando el versículo 20 dicen: Las palabras de  2 Pedro van dirigidas contra los falsos doctores, que interpretaban la palabra profética a su modo y a sus conveniencias.
Pedro  continúa diciendo que las escrituras nos fueron escritas por voluntad humana.
La razón de que la Sagrada Escritura no puede ser interpretada según la voluntad de cada hombre es que se trata no de una obra humana, sino de una obra divina. El Espíritu Santo es el autor principal de la Sagrada Escritura, porque los profetas hablaron movidos, impulsados, llevados (φερόμενοι) por este Espíritu divino  para que dijeran aquello y sólo aquello que él quería comunicar a los demás hombres. El profeta es el intérprete de Dios, habla en su nombre, o bien escribe, es como un instrumento en manos de Dios.
Pedro refuta la teoría de los falsos maestros o profetas, que cuestionaban la parusía del Mesías.
Bajo dos razones.

1.    Somos testigos del Poder del Evangelio y de que Jesús vendrá otra vez.
2.    Tenemos la palabra profética  que nos habla de esto.

Esta sección es una afirmación rotunda de la inspiración de las Escrituras. Pedro afirma que los profetas del Antiguo Testamento escribieron el mensaje de Dios, y que él se pone en la misma categoría de los demás apóstoles porque ellos también proclamaban la verdad de Dios. La Biblia no es una colección de fábulas ni de conceptos humanos acerca de Dios. Es en realidad la Palabra de Dios dada por medio de las personas para las personas.


III.- Bosquejo Homilético.

Introducción: Es una carta para animar, fortalecer y prevenir a los hermanos sobre los falsos maestro o profetas.

Tema: Razones para creer en la parousía de Cristo.

I.- Primera razón: Los apóstoles como testigos fidedignos.
    1.- Los apóstoles fueron testigos Oculares.
    2.- Los apóstoles escucharon la conversación que sostuvieron Jesús, Elías y Moisés. Lucas 9:31.  

II.- Segunda razón. La Escritura el fundamento fidedigno.  
1.-  Porque es de inspiración Divina.
2.- porque nos habla de la venida de Cristo y del poder del evangelio.

Conclusión. Pedro confirma el evangelio de Cristo a través de su testimonio y confirma el evangelio de Cristo a través de la palabra profética.


[1] Notas Sobre 2 de Pedro Por Bill H. Reeves
[2] Notas sobre 2 Pedro por Bill H. Reeves.
[3] Introducción al Nuevo testamento por Everett Harrison p. 409.
[4] Introducción al Nuevo Testamento por Everett Harrison p. 423.
[5] De piedra en Piedra. PETER JEFFERY. P. 159.
[6] Comentario al Nuevo testamento 1 y 2 Pedro por Simón Kistemaker p. 188.
[7] Comentario al Nuevo testamento 1 y 2 Pedro por Simón Kistemaker p. 188.
[8] Frente a la falsedad, por Ray C. Stedman. P. 1.
[9] Introduccion al Nuevo Testamento Por Everett Harrison
[10] De piedra en Piedra. PETER JEFFERY. P. 159.
[11] La defensa apostólica del evangelio, por F.F. Bruce. P. 16.